El arresto de Rothwell tuvo lugar en un bloque de apartamentos el domingo por la mañana por parte de agentes de la Policía Nacional, que habían trabajado con la Agencia Nacional del Crimen (NCA, pos sus siglas en inglés) y la Policía del Gran Manchester (GMP).
“Estoy muy satisfecho de que la cooperación entre nuestras fuerzas policiales haya permitido sacar de las calles a un británico acusado de delitos graves en mi país y que ahora tendrá que hacer frente a la Justicia”, dijo el embajador británico, Hugh Elliott.
“Quiero dar las gracias a la Policía Nacional por su compromiso y el trabajo fantástico que ha hecho con esta detención, más aún en un momento tan difícil, en medio de una pandemia”, agregó. “Esta operación pone de manifiesto, una vez más, la fortaleza de nuestra relación. Las fuerzas de seguridad del Reino Unido y España van a seguir trabajando estrechamente para velar por la seguridad de nuestros ciudadanos”.
Rothwell, de la localidad inglesa de Salford, estaba buscado por la policía de Manchester y en octubre de 2019 se emitió una orden de detención europea. Se le buscaba por conspirar supuestamente para asesinar a dos hombres y también por dos cargos de conspiración para cometer graves daños corporales.
Los investigadores de la NCA y los oficiales de enlace internacional de la agencia británica en España rastrearon a Rothwell, y los agentes españoles ejecutaron el arresto. El lunes, compareció ante el juzgado de guardia y quedó en prisión provisional. En una fecha aún por confirmar reaparecerá ante el tribunal para afrontar los procedimientos de extradición.
Matt Horne, subdirector de investigaciones de la NCA, dijo: “El arresto de un fugitivo por acusaciones excepcionalmente graves es un gran resultado.
“Es un ejemplo de cómo la agencia y nuestros socios internacionales trabajan para proteger al público, e incluso durante el coronavirus, cuando ha habido mayores obstáculos que superar”.
El inspector jefe de detectives Carl Jones, del Equipo de Incidentes Mayores de GMP, informó de que el arresto es parte de un investigación en curso de la Policía del Gran Manchester en una disputa entre dos grupos rivales del crimen organizado en Salford en 2015.
“Este arresto no hubiera sido posible sin una excelente relación de trabajo entre GMP, el Servicio de Fiscalía de la Corona, la Agencia Nacional del Crimen y las autoridades españolas”, agregó.
