La startup Kinsa fabrica termómetros inteligentes que se pueden utilizar para detectar y rastrear la propagación de enfermedades contagiosas. Estos termómetros se vinculan a una aplicación que avisa a los usuarios siempre que deben buscar atención médica, en función de su edad, si tienen fiebre y cuáles son sus síntomas.
Un alumno del Instituto Tecnológico de Massachusetts creó esta compañía con el propósito de recopilar información en tiempo real sobre cuándo y dónde se propagan las enfermedades infecciosas. Cuando el Covid-19 llegó a los Estados Unidos, la compañía pudo estimar su propagación en tiempo real al rastrear los niveles de fiebre por encima de lo que normalmente se podría esperar, según informa el portal Con Salud.
Kinsa rastrea las tasas inusuales de fiebre, y crea un mapa para ayudar a visualizar la prevalencia de la enfermedad en las comunidades
Kinsa vendió y regaló mas de 1,5 millones de termómetros a familias estadounidenses, incluidos cientos de miles de hogares de distritos con bajos ingresos. Así se puede controlar el nivel de contagio de brotes de enfermedades infecciosas en los núcleos familiares. También a nivel comunitario, los datos generados por los termómetros son anónimos y se pueden compartir con los padres y los profesores, para conocer qué enfermedades se están contagiando y así prevenir la propagación de estas en las aulas.
En plena pandemia de el Covid-19, Kinsa tiene un papel importante en la respuesta estadounidense a los contagios. Con su herramienta Healthweather, rastrea las tasas inusuales de fiebre, uno de los síntomas más comunes de Covid-19, y crea un mapa para ayudar a visualizar la prevalencia de enfermedad en las comunidades. Así, Kinsa se ha convertido en un centro de información para el público, los medios de comunicación y los investigadores.
