El nuevo curso escolar ha comenzado marcado por la pandemia del Covid-19. Desde las instituciones sanitarias se han marcado protocolos para proteger a los alumnos y también a los profesores de los colegios frente al virus, y para tratar de evitar los contagios en los centros. En el caso de que una persona desarrolle síntomas compatibles con el Covid-19, el centro escolar deberá poner en marcha un protocolo de actuación marcado por el Ministerio de Sanidad.
En el caso de los alumnos, que es similar al de los trabajadores, el primer paso de este procedimiento es colocar una mascarilla quirúrgica al afectado, y llevarlo a un espacio separado. Rápidamente se contactará con los familiares o tutores legales del mismo.
Los centros educativos deberán disponer de stock suficiente de este material de protección
La persona que acompañe al alumno con síntomas, deberá llevar siempre el material de protección adecuado. Utilizará mascarilla quirúrgica si la persona con síntomas la lleva, y mascarilla FFP2 sin válvula si la persona con síntomas no se puede poner una mascarilla quirúrgica, como es el caso de los niños menores de seis años, personas con problemas respiratorios, que tengan dificultad para quitarse la mascarilla por sí solas o que tienen alteraciones de conducta que hagan inviable su utilización. Además, se colocarán una pantalla facial y una bata desechable.
El Ministerio de Sanidad recalca en este punto que los centros educativos deberán disponer de stock suficiente de este material de protección para ser utilizado siempre en los casos de atención a casos sospechosos. Además, el espacio en el se esperará, será preferiblemente una sala para uso individual, elegida previamente, que cuente con una ventilación adecuada y con una papelera de pedal con bolsa, donde tirar la mascarilla si es necesaria su renovación, y los pañuelos desechables. También se obligará a ventilar, limpiar y desinfectar la sala tras su utilización.
Rápida actuación
Los trabajadores del centro que sean personas vulnerables al virsu deberán informar a los equipos directivos de sus condiciones, y el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales valorará si es necesario tomar medidas adicionales. En las situaciones en las que se detecte un caso sospechoso, la persona trabajadora especialmente sensible no será la responsable de la atención del caso, y continuará con su actividad docente y extremará las medidas preventivas recomendadas.
Para estos casos habrá una persona designada como responsable del manejo del Covid-19 en el centro. Será esta quien se encargará de contactar con los familiares o tutores legales en caso de que la persona afecta sea menor de edad. Ellos acudirán al centro para recoger al niño, y “deberán contactar tan pronto como sea posible con su centro de salud de Atención Primaria de referencia o con quien su comunidad haya designado, o llamar al teléfono de referencia de su comunidad autónoma para responder ante un caso sospechoso de Covid-19. Asimismo, en caso de presentar síntomas de gravedad o dificultad respiratoria se llamará al 112 o al 061”, detalla el protocolo.
