No hay prácticamente sector que se vaya a librar de las pérdidas por el coronavirus. Pero, sin duda, el de la hostelería será uno de los más castigados. Tanto es así que la crisis del Covid-19 destruirá al menos 900.000 empleos en el sector, según un estudio.
La consultora Foqus y la Universidad de Valencia calculan que la hostelería podría perder 900.000 empleos. Aunque vaticinan que podrían llegar a ser más de un millón en el peor de los escenarios.
El estudio realizado por ambas entidades augura que las ventas en el sector caerán entre un 45% y un 55%. Y si el retroceso fuera incluso mayor, se podrían destruir hasta 1,1 millones de empleos.
La dependencia que la hostelería tiene del turismo queda claro en este estudio. En el mejor de los casos, si el turismo se recobra desde el próximo octubre, la facturación de la hostelería caería en más de 54.000 millones a finales de año.
Si además las restricciones de movilidad se extienden por los posibles rebrotes, el desplome del sector costaría 70.000 millones en este año. Sería en este escenario donde más empleos se perderían. Unos 676.000 directos y otros 424.000 indirectos. Lo supera el millón de puestos de trabajo.
43% de apertura
A todo ello se une que sólo el 43% de los bares y restaurantes planea abrir durante la desescalada. Lo asegura un estudio del portal El Tenedor, que agrupa a más de 80.000 establecimientos.
El informe pone de manifiesto la incertidumbre de los negocios sobre cómo será la vuelta de los clientes. De los que sí abrirán, el 40% no tiene clara la fecha. Un 15% prefiere esperar y ver cómo se desarrolla el desconfinamiento. Y sólo un 2% tiene claro que cerrará definitivamente tras la crisis.