Su nombre es Domenico Lucano y como alcalde de Riace, en la región italiana de Calabria, al sur del país, se ha convertido en un símbolo de la acogida de refugiados. Ahora se encuentra en arresto domiciliario bajo la acusación de favorecer la inmigración ilegal.
La fiscalía de Locri explica que las medidas se han emitido tras una investigación sobre la “gestión de los fondos del Ministerio del Interior y de Delegación de Gobierno de Reggio Calabria al Ayuntamiento de Riace para la acogida de los refugiados y solicitantes de asilo político”. Pero especifica que sobre la gestión de los fondos, aunque considerada “desordenada”, no se han cometido ilegalidades, ni malversación.
El alcalde junto a su compañera sentimental, Tesfahun Lemlem, a quien se le ha comunicado la prohibición de permanencia en Italia, violaron algunas normativas para hacer obtener a inmigrantes los documentos para permanecer en Italia, entre ellos matrimonios de conveniencia, informa la prensa de Calabria, que ha difundido escuchas en las que Lucano habla de bodas consensuadas con italianos para que algunos inmigrantes pudieran permanecer en el pueblo.
En los últimos meses Lucano había mantenido un enfrentamiento con el ministro del Interior, Matteo Salvini, que había bloqueado los fondos destinados a proyectos de acogida en Riace después de los problemas de justificación de los gastos denunciado por la Delegación de Gobierno. Tras estos enfrentamientos comenzó la investigación de la fiscalía que ha concluido con esta detención.
Un modelo que había dado la vuelta al mundo
La historia de Riace y de cómo pasó a tener cerca de 2.500 habitantes, de los que un tercio son inmigrantes, dio la vuelta al mundo. Domenico Lucano, en el cargo desde 2004, se había volcado en la acogida para paliar el importante problema de despoblación de esta localidad. Las casas abandonadas habían sido restauradas con los fondos europeos para dar una vivienda a los inmigrantes, se crearon talleres artesanales y se abrieron nuevos restaurantes. De nuevo el pueblo tuvo una guardería y un colegio donde se imparten varios idiomas.
El renacer de Riace había sido incluso el tema de un documental de 2010 del cineasta alemán Wim Wenders titulado ‘Il Volo’, en el que contaba la historia de cómo Lucano había logrado que su pueblo sobreviviera gracias al eficaz proyecto de acogida de refugiados, dándoles cobijo en las casas abandonadas del municipio.
En 2016, la revista Forbes le incluyó entre los 40 líderes mundiales más influyentes y el pasado verano la alcaldesa de Barcelona (España), Ada Colau, visitó el pueblo italiano y destacó su “ejemplo de buena política en la acogida” de refugiados y también de “integración y lucha contra la xenofobia”.
El escritor Roberto Saviano paseó también este verano por su calles repletas de murales que invitan a la acogida y que relatan el carácter multiétnico del pueblo con habitantes de 26 nacionalidades. Expresaba así su solidaridad después de que el ministro del Interior, Matteo Salvini, bloqueara los fondos destinados a proyectos de acogida en Riace.
Mensajes de apoyo de Carmena y Colau
Tras su detención, miembros del Partido Demócrata (PD) y de Libres e Iguales (LEU) junto a varias asociaciones han manifestado su solidaridad con el alcalde y han subrayado la importancia de su proyecto.
Lucano está recibiendo decenas de muestras de apoyo de alcaldes y representantes políticos de todo el mundo, especialmente en España, con mensajes de las alcaldesas de Madrid y Barcelona, Manuela Carmena y Ada Colau.
Las ciudades tenemos la responsabilidad de acoger y dar refugio a quien huye de la barbarie. Por eso no se entiende que quien pone su solidaridad para ello sea perseguido. Madrid estará siempre con los derechos humanos y las ciudades que, como Riace, acogen y abrazan #MimmoLucano
— Manuela Carmena (@ManuelaCarmena) October 2, 2018
https://twitter.com/AdaColau/status/1047053648574996481