Hace una semana, Francia iniciaba su desescalada. Y entre las medidas, la reapertura de los colegios. Ahora, el país ha tenido que cerrar 70 de las 40.000 escuelas que volvían a abrir sus puertas tras detectar casos de Covid-19.
Así lo ha confirmado el ministro francés de Educación, Jean-Michel Blaquer, quien ha insistido en que se trata de un “porcentaje muy bajo”.
Los focos parecen puntuales. Así, en la ciudad de Sens, en el centro de Francia, se han cerrado hasta 25 colegios. Después de un sólo caso de Covid-19 en un adulto. Lo que da muestras del “protocolo sanitario estricto” que impera en el país para que la desescalada sea segura. Esa posibilidad de cierre ya estaba contemplada, según ha señalado el ministro.
Blaquer ha señalado además que “estamos muy atentos a que haya el menor riesgo posible”. Y criticaba que a veces se les reprocha ser demasiado prudentes. En cambio, otras ‘pecan’ de serlo suficientemente.
De momento, además, solo han vuelto a clase los estudiantes de departamentos en verde. Es decir, de zonas con una situación epidémica menos comprometida. Se espera que antes del verano lo hagan los de las zonas en rojo.
Mascarillas
Además, los alumnos de secundaria en Francia tienen obligatorio el uso de mascarillas, que sólo se quitan para comer. No así los de primaria.
De ellos, sólo el 30% de los alumnos ha vuelto a las clases presenciales. El 70% restante continúa los cursos a distancia, como en confinamiento. Y es que en Francia se está levantando las medidas poco a poco.
Cautela en un país en el que han muerto ya 28.100 personas, superando a España en fallecidos. Todavía hay 19.300 personas hospitalizadas, de las cuales 2.100 están en UCI. En total, el país suma 142.411 casos.