Las advertencias de la OMS sobre el Covid-19 desde su inicio han sido muchas. Sin embargo, pocos le hicieron caso cuando la pandemia arrancó en Asia. La organización avisaba de que traspasaría fronteras. Pero muchos dirigentes subestimaron al virus. Volvieron a lanzar sus advertencias cuando el coronavirus irrumpió en Italia. Pero Europa se vio igualmente devastada. Y lo volvieron a hacer cuando el virus saltó a América. Ahora, advierten de que, lejos de estar controlada, la pandemia se acelera estos días. Y aconseja al mundo echar el freno en la desescalada. Algo que ya han tenido que hacer algunos países.
El avance del virus, aseguran, gana velocidad. El pasado domingo se registraron más de 183.000 nuevos casos. Récord en un día desde que comenzó el virus. De ellos, 116.000 se producían en América, nuevo foco del coronavirus.
“La pandemia sigue acelerándose”, ha dicho Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS. Y, como ejemplo, señalaba que para llegar al primer millón de casos, hicieron falta tres meses. Ahora, sólo en la última semana, los nuevos casos han llegado al medio millón.
Tedros achacó a la “falta de liderazgo y unidad” la rapidez de la pandemia. Y lamentó “la politización” de la epidemia.
Países marcha atrás
Ante la desescalada de muchos países, la OMS ha calificado esta etapa de “peligrosa” y ha pedido no bajar la guardia. Sobre todo, tras ver los rebrotes en algunos estados que habían dado por superada la primera oleada de contagios.
Entre ellos, Portugal. Alabado por su gestión, siendo vecino de España logró contener el virus desde el principio, ha tenido que imponer de nuevo restriccione sen Lisboa para controlar varios brotes surgidos. Se han prohibido las reuniones de más de 10 personas y las tiendas, bares y restaurantes deben cerrar a las 20:00 horas.
En Nueva Zelanda, tras dar por eliminado el virus en su territorio, detectaba dos contagios importados de Reino Unido. Lo que ha llevado al país a poner medidas de control en las fronteras. Entre ellas, cuarentena de 14 días, de la que se podrá salir solo con un test negativo bajo el brazo.
En China se ha tenido que cerrar parte de Pekín. Las vallas y controles de acceso se han impuesto de nuevo en una treintena de complejos residenciales. Y en Corea del Sur ya han advertido a la población para que se prepare para una lucha prolongada contra el Covid.
Por su parte, en España se han detectado hasta 11 brotes nuevos. La mayoría de ellos, según Sanidad, ya controlados. Aunque eso ha provocado que tres comarcas aragonesas echaran el freno en la desescalada y volvieran a la fase 2.