Montenegro, Serbia, Macedonia del Norte, Bosnia Herzegovina, Albania y Kosovo esperan ya a las puertas de la UE para ocupar el sitio que ha dejado vacío Reino Unido. Y es que si unos se van, otros están deseando entrar.
La Comisión Europea presenta este miércoles su propuesta para reformar el proceso de adhesión de nuevos Estados miembros al bloque comunitario. El gesto es un guiño a Macron, a fin de que levante el veto a las entradas de Albania y Macedonia del Norte.
Tras el Brexit el pasado 31 de enero, hasta 6 países de los Balcanes occidentales esperan para formar parte del nuevo proyecto europeo. La UE considera además que es una oportunidad histórica. Y no se la puede dejar pasar. Sobre todo, en un momento en que otras potencias como China y Rusia están aumentando su presencia en la región balcánica.
El antiguo Gobierno europeo de Jean Claude Juncker se marcó como objetivo la entrada progresiva de los países de los Balcanes para 2025. Y su sustituta, Von der Leyen, continuará por ese camino. Pese a las reticencias de Francia.
París cree, por una parte, que el proceso de admisión debe ser reversible en todas sus etapas. Por otro lado, proponen que el país candidato vaya teniendo acceso a ciertos programas de ayuda. Algo que Bruselas ve con buenos ojos.
Los 6 países que luchan ahora por entrar en la UE son:
Montenegro
Fue en el año 2006 cuando el Parlamento de Montenegro proclamó su independencia. Dos años después, llamaba a la puerta de la UE. Pero las negociaciones de adhesión no comenzaron hasta 2012.
De momento, no forma parte de la zona euro, pero su moneda de facto es la divisa europea.
Serbia
Serbia presentó su solicitud en diciembre de 2009. La Comisión emitió en 2011 un informe favorable. Sin embargo, las negociaciones prácticamente se paralizaron hasta 2014.
De un total de 35 capítulos de negociación, se han iniciado conversaciones sobre 17 de ellos. Dos ya han sido cerrados de manera provisional.
Macedonia del Norte
Francia mantiene muchas reticencias a su entrada. Por eso, las negociaciones ni siquiera han comenzado. Sin embargo, Macron está solo en su veto. Dar un nuevo portazo al país es tema delicado, debido a los esfuerzos del estado por resolver sus problemas territoriales con Grecia. Algo que ha propiciado hasta su cambio de nombre, pasando de Macedonia a Macedonia del Norte.
Albania
Presentó su solicitud en 2009, pero fue rechazada en 2010. La Comisión estimó que el país tenía que cumplir los requisitos de adhesión. Gracias a los avances, fue considerado candidato a entrar en 2012. Y en 2018 se le reconoció para empezar a negociar.
Bosnia Herzegovina
Solicitó su ingreso en 2016 y está considerado un candidato potencial. En caso de que los Estados miembros le den el visto bueno, podrá pasar a tener estatus de candidato oficial.
Sin embargo, el veto a Macedonia del Norte y Albania complica su situación.
Kosovo
Como reto tiene normalizar sus relaciones con Serbia. Un paso previo a que sus negociaciones de adhesión arranquen. Todavía, hay cinco países europeos que no reconocen a Kosovo como Estado. Entre ellos, España.
Por ello, su caso es el más delicado de la futura ampliación.
De entrar a la vez en 2025, sería la segunda gran ampliación tras la de fundación en 1952 y la de 2004, cuando entraron en la UE hasta 12 países. El último en entrar fue Croacia en el año 2013.