El cerco internacional se estrecha contra Maduro. A las declaraciones de Trump se suma ahora la iniciativa de cinco países latinos para llevar al presidente venezolano ante el tribunal de La Haya. Consideran que ha violado los derechos humanos y, por ello, presentarán una demanda este miércoles.
Argentina, Colombia, Chile, Paraguay y Perú se unirán para firmar una carta dirigida a la Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya. En la misiva se pedirá la investigación sobre los crímenes contra la humanidad que estaría cometiendo el régimen venezolano. Los cinco países latinos condenarán, además, la ruptura del orden constitucional de Venezuela y han debatido cómo hacer frente a la crisis humanitaria.
La solicitud no tiene precedentes y se apoya en dos informes elaborados por la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU y la Organización de Estados Americanos (OEA).
El presidente de Perú, Martín Vizcarra, ha asegurado que «las graves violaciones de los derechos humanos» que se están cometiendo en Venezuela, justifican que se active este mecanismo de denuncia previsto por el tribunal de La Haya.
Por su parte, el presidente colombiano, Iván Duque, cree que ha llegado el momento de adoptar sanciones para lograr la transición en el país. «Lo que ocurre en Venezuela es triste. Es una dictadura que ha arruinado todas las libertades. Que ha perseguido a todo un pueblo y que es la causante de una grave crisis humanitaria», ha dicho.
Está previsto que los cinco países presenten la carta este miércoles. Aunque eso no significa que vaya a haber una investigación inmediata. Será la Fiscalía del tribunal de La Haya la que decida si abrirla o no.
Respuesta venezolana
Ha sido el canciller venezolano, Jorge Arreaza, el que ha dado la respuesta oficial del país. Ha calificado la maniobra como una estrategia «para agredir» al Gobierno que preside Maduro.
«Utilizan como sustento el informe de un hombre que quiere la intervención y la guerra», ha dicho Arreaza. Se refería así al secretario general de la OEA, Luis Almagro. No ha dudado en calificarle, además, de «sicario».