El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha logrado una victoria contundente en las elecciones presidenciales al imponerse por más de 11 puntos a la candidata correísta Luisa González, según los datos oficiales difundidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE) con casi el 95% de los votos escrutados. Este resultado reafirma su mandato por un nuevo periodo de cuatro años y frena el regreso del correísmo al poder.
A pesar de la claridad de los resultados, González no ha reconocido la victoria del líder de Acción Democrática Nacional (ADN) y ha denunciado presuntas irregularidades, anunciando que solicitará un recuento de votos. En contraste, la presidenta del CNE, Diana Atamaint, declaró irreversible la tendencia a favor de Noboa.
El anuncio oficial se produjo tras varias horas de espera. Mientras tanto, los seguidores del presidente salieron a las calles de Quito, Guayaquil, Cuenca y otras ciudades del país para celebrar el triunfo. Caravanas, música y fuegos artificiales marcaron una noche de festejos. La vicepresidenta electa, María José Pinto, también se sumó a las celebraciones desde la capital.
Reconocimiento internacional
Desde su residencia privada en Olón, Noboa se dirigió emocionado al país acompañado de su esposa. Agradeció el respaldo recibido y destacó el patriotismo de la ciudadanía durante la jornada electoral. En su discurso, hizo un reconocimiento especial a su madre y a su esposa por su implicación activa en la campaña.
El triunfo de Noboa recibió rápidamente el reconocimiento por diversas figuras políticas nacionales, como Henry Cucalón y Otto Sonnenholzner, quienes subrayaron la habilidad del mandatario para conectar con el electorado. También se han pronunciado felicitaciones desde organismos internacionales y gobiernos de América Latina, incluyendo la OEA, Estados Unidos, Colombia, Perú, Guatemala, República Dominicana, Paraguay, Costa Rica, Argentina y Venezuela.
Además, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, expresó su respaldo al mandatario ecuatoriano, destacando la importancia de consolidar un proyecto que promueva la libertad, la prosperidad y la seguridad en el país andino.
El proceso electoral se desarrolló bajo un contexto de tensión y alta violencia, que llevó a Noboa a decretar un estado de excepción parcial en la víspera de los comicios en Ecuador. A pesar de ello, la jornada transcurrió sin incidentes mayores y fue calificada como pacífica por observadores internacionales.