Las palabras de condena junto con llamamientos a la calma han sido las más escuchadas entre la mayoría de gobiernos y líderes europeos -con algunas excepciones- tras comenzar lo que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció esta madrugada como «una operación militar» en Ucrania para proteger a las personas de «abusos y del genocidio» del Gobierno ucraniano.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, condenó el «ataque bárbaro», anunció nuevas sanciones europeas contra «sectores estratégicos» rusos, incluido el bloqueo de sus bancos al mercado europeo, y advirtió a Moscú de que la Unión Europea no permitirá que «derribe la arquitectura de seguridad» en el continente.
Para el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, estas «son las horas más oscuras para Europa desde el final de la Segunda Guerra Mundial», ya que «una potencia nuclear importante ha atacado un país vecino y está amenazando con represalias a cualquier otro estado que pueda acudir a su rescate».
Francia
El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió que Rusia suspenda «inmediatamente» sus operaciones militares en Ucrania, a las que calificó de «guerra». «Francia condena firmemente la decisión de Rusia de hacer la guerra a Ucrania. Rusia debe poner inmediatamente a sus operaciones militares», afirmó.
«Putin ha pisoteado la soberanía de Ucrania y ha cometido el atentado más grave a la paz y la estabilidad de nuestra Europa desde hace decenios», aseguró Macron en un discurso solemne desde el Elíseo, en el que añadió la bandera ucraniana a las de Francia y la UE habituales.
España
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, condenó este jueves la agresión rusa y expresó la solidaridad de España «con el Gobierno y el pueblo ucraniano». «Es una violación flagrante de los derechos internacionales y la soberanía internacional de Ucrania», ha declarado tras reunirse con el Consejo Nacional de Seguridad, presidido por el rey Felipe VI.
Alemania
El canciller alemán, Olaf Scholz, condenó el ataque, que calificó de «ruptura flagrante del derecho internacional» que «no puede ser justificada bajo ningún concepto». «Alemania condena en los términos más fuertes este acto carente de consideración del presidente Putin» añadió.
Reino Unido
El primer ministro británico, Boris Johnson, aseguró que «Occidente no se quedará a la espera» mientras Rusia ataca Ucrania, en una conversación con el presidente de este país, Volovímir Zelenski, tras el inicio de la ofensiva rusa.
Italia
El primer ministro italiano, Mario Draghi, condenó el ataque y lo tachó de «injustificado e injustificable». «Italia está cerca del pueblo y las instituciones ucranianas en este momento dramático», dijo Draghi.
Austria
Austria condenó de forma enérgica el ataque y demandó que Moscú detenga de forma inmediata estas hostilidades contra Ucrania que «nuevamente suponen una violación flagrante de su integridad territorial y soberanía», indicó el canciller austríaco, el conservador, Karl Nehammer.
Portugal
El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, y el primer ministro luso, António Costa, condenaron la intervención militar de Rusia en Ucrania y denunciaron que supone una «flagrante violación del derecho internacional». Rebelo de Sousa convocó para hoy una reunión de urgencia del Consejo Superior de Defensa Nacional.
Polonia
El presidente polaco, Andrzej Duda, condenó el ataque ruso y pidió una «respuesta conjunta» de la OTAN, además de convocar una reunión del Consejo Nacional de Seguridad.
Países Bajos
El ministro neerlandés de Exteriores, Wopke Hoekstra, advirtió este jueves, en una “fuerte condena” a la ofensiva rusa a Ucrania, que Moscú “pagará un alto precio” por lo que calificó de un “acto de guerra” contra Kiev.
Rumanía
El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, condenó el ataque militar lanzado por Rusia contra Ucrania, y abogó por que la comunidad internacional tome represalias contra el Kremlin.
Hungría
El Gobierno de Hungría afirmó que «la guerra es el peor escenario posible» y mostró su apoyo a la soberanía de Ucrania, aunque sin condenar explícitamente el ataque lanzado por Rusia contra ese país.
Bulgaria
Mientras, el ministro búlgaro de Defensa, Stefan Yanev, respaldó la tesis rusa de que el ataque a Ucrania es sólo una «operación militar» y que hay que evitar frivolizar y «exagerar» al usar la palabra «guerra».
Letonia, Lituania y Estonia
Los gobiernos de Letonia, Lituania y Estonia apelaron al artículo 4 de la OTAN, que prevé consultas inmediatas entre los aliados, al tiempo que alertaron contra la «previsible» campaña de desinformación y ciberataques rusos. «Tenemos que estar preparados ante una impredecible ola migratoria, ciberataques y campaña de desinformación por parte rusa», dijeron.
Croacia
El primer ministro de Croacia, Andrej Plenkovic, condenó enérgicamente la invasión, responsabilizó exclusivamente a Moscú de la agresión y la llamó a detener su ataque.
Finlandia
El presidente finlandés, Sauli Niinistö, manifestó su «conmoción» y expresó su «más severa condena» ante el ataque ruso, país al que expresó su «absoluta solidaridad».
Suecia
La primera ministra sueca, la socialdemócrata Magdalena Andersson, condenó el ataque ruso y lo calificó de «ilegal e indefendible», además de una amenaza a la democracia.
Noruega
Su homólogo, el primer ministro noruego Jonas Gahr Støre, calificó también la operación militar iniciada en el este y sur de Ucrania de una «grave violación» y atribuyó toda la responsabilidad a Rusia «por lanzar a Europa en esta oscura situación».
Dinamarca
La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, se expresó en términos similares, condenando un acto «terrible y sin provocación», que considera que viola los pactos y el derecho internacional.