Los británicos votaron hace más de dos años a favor de abandonar la Unión Europea. Sin embargo, durante este tiempo el Brexit no ha sido culminado. Por lo tanto, ¿por qué la situación del Brexit está creando un clima de incertidumbre a los británicos?
El tema es muy importante y sumamente complicado por lo que trataremos los 4 escollos que impiden ultimar el Brexit.
Falta de acuerdo en Reino Unido
Respecto a los resultados sobre el referéndum, el 52% de los británicos decidieron salir de la UE. Sin embargo, no se explicó qué tipo de Brexit sería. Por eso ahora, tras el acuerdo alcanzado entre la Unión Europea y Reino Unido debe aprobarse en el Parlamento británico.
Y así lo intentó Theresa May, primera ministra de Reino Unido. May planeó una votación para que este acuerdo fuese aprobado. Aunque al final tuvo que posponer dicha votación porque carecía de suficientes apoyos como para ser aprobada por la Cámara de los Comunes.
Tras lo sucedido, los mismos diputados de su propio partido trataron de sentenciarla a través de un voto de confianza. Esta estrategia salió defectuosa y Theresa May siguió en el cargo.
¿Brexit duro o suave?
Quizás el mayor de los escollos sea la futura relación entre la Unión Europea y Reino Unido después del Brexit.
De no haber acuerdo en el Parlamento Británico se produciría un Brexit duro. Una salida de la UE sin acuerdo previo con la oposición del Parlamento contraería el producto interior bruto (PIB) un 9,3%. Reino Unido cortaría muchos lazos con la UE, lo que ocasionaría un terrible atraso a la economía británica.
Por el contrario un Brexit suave significaría que Reino Unido seguiría en la órbita de la UE. Los simpatizantes de este modelo de Brexit defienden la permanencia en el mercado único. Esto garantiza la libertad de movimiento dentro de la Unión Europea. Tanto personas, bienes o servicios y capitales. Este tipo de Brexit saldría adelante si hay acuerdo en el Parlamento Británico y Europa diese el visto bueno.
Inmigración
La primera ministra, Theresa May, quiere reducir el número de ciudadanos de la UE que pueden vivir y trabajar en Reino Unido. May pretende adoptar esta medida tras el Brexit. Esta norma ha sido muy criticada en el Parlamento Británico puesto que afectaría a los derechos de los ciudadanos británicos que viven el la UE.
La frontera con Irlanda del Norte
Geográficamente hablando, Irlanda se divide en dos. La República de Irlanda por un lado e Irlanda del Norte por otro. El problema es que no hay puestos de control fronterizos entre las dos Irlandas. Esto es algo muy común en la mayoría de los países de la Unión Europea.
Sin embargo, en el suponer que Reino Unido abandonase la unión aduanera, sería necesario establecer una frontera. La finalidad sería controlar las mercancías y personas que pudiesen atravesar la frontera.
Sin duda este es uno de los puntos más delicados ya que una frontera con severos controles podría provocar de nuevo un aumento de tensión y violencia entre las dos Irlandas. Según el acuerdo actual, cuando Reino Unido salga de la UE seguirá respetando varias leyes de la misma hasta que se resuelva el tema de la frontera irlandesa.
