Angela Merkel no se presentará a la reelección como líder del partido conservador alemán, la Unión Demócrata Cristiana (CDU), según ha anunciado este lunes la canciller alemana a sus correligionarios en la sede del partido en Berlín.
Merkel, que ha dirigido el partido durante 18 años, da un paso atrás después que de la CDU y sus socios socialdemócratas de Gobierno haya sufrido este domingo un descalabro en las elecciones en el estado federado de Hesse, el quinto land más rico del país y que de que sus aliados de la Unión Social Cristiana (CSU) perdieran la mayoría absoluta en su feudo de Baviera el pasado 14 de octubre.
La canciller alemana no buscará la reelección en el congreso del partido que se celebra en diciembre. “No se vuelve a presentar a la presidencia del partido”, ha afirmado un dirigente de la formación, confirmando una información avanzada en la edición digital de la revista ‘Der Spiegel’ y del periódico ‘Handelsblatt’. Pero ha manifestado su voluntad de seguir como jefa de Gobierno hasta el fin de la legislatura, previsto para 2021.
El revés en las urnas que este domingo sufrieron tanto los correligionarios de Merkel como su socio menor en el Gobierno de Berlín, el Partido Socialdemócrata (SPD), se percibe a todas luces como una expresión del descontento de la población con la política de Berlín, apenas un año después de las generales y cuando solo han transcurrido siete meses de que Merkel lograra formar Gobierno con los socialdemócratas tras arduas negociaciones.
Días atrás, en Alemania ya se especuló que un descalabro electoral en los comicios regionales de Hesse podría conducir a una ruptura prematura del Ejecutivo en Berlín y precipitar la despedida política de Merkel.
La CDU celebrará a principios de diciembre un congreso federal para elegir a su líder. En caso de que finalmente Merkel no se presente, sería un cambio en lo esgrimido hasta ahora, dado que ella siempre ha unido la presidencia del partido con su cargo al frente de la Cancillería.