Ante esta situación, la Fundación Jiménez Díaz y la Universidad Autónoma de Madrid organizaron recientemente las IV Jornadas UAM y VIH, en las que expertos en la materia actualizaron los aspectos más relevantes de esta enfermedad desde una perspectiva multidisciplinar.
El Dr. Miguel Górgolas, jefe asociado del Servicio de Medicina Interna en la Fundación Jiménez Díaz, señala que actualmente se dispone de fármacos muy eficaces para el control de la infección por VIH y que, gracias al tratamiento antirretroviral, los pacientes afectos por la misma tienen una buena calidad de vida y una esperanza de vida muy similar a la población no infectada. Además, añade que, en un futuro, el empleo de inmunoterapias, una realidad ya en el tratamiento de muchos tumores podría ayudar a controlar y, tal vez, erradicar la infección por VIH: “Aquí hay un gran camino que recorrer todavía”, asevera.
Diferentes tratamientos frente al VIH
Durante las jornadas se mostraron dos nuevas estrategias de tratamiento. La primera es la biterapia, es decir, el control de la infección con dos fármacos, en lugar de tres, que era lo establecido hasta ahora. “La estrategia de usar menos fármacos tiene la ventaja de que los posibles efectos tóxicos de tomar una medicación de por vida son más limitados que si se toman tres o más compuestos”, asegura el Dr. Górgolas, aunque comenta que su aplicación solo se prescribe en determinados pacientes.
Por otro lado, se expusieron los datos recientes de los tratamientos administrados una vez al mes por vía parenteral, intramuscular. “Esta es una estrategia de tratamiento con dos fármacos que consiguen mantener el virus indetectable durante cuatro y posiblemente ocho semanas. De esta forma, los pacientes con infección no tienen que tomar una o varias pastillas diarias, sino recibir dos inyecciones intramusculares cada vez”, afirma el jefe asociado del Servicio de Medicina Interna del hospital, añadiendo que, a pesar de que estos medicamentos se encuentran todavía en fase de desarrollo clínico y no están comercializados, “los resultados están siendo muy prometedores”.
Además de estos tratamientos, cabe destacar la investigación filogenética, que consiste en el estudio del material genético de cada uno de los virus que pueden ser transmitidos para identificar su origen evolutivo, es decir, de dónde proceden y cómo se ha mezclado su material genético con otros virus similares, para determinar cómo se ha producido. “En ocasiones, también se puede predecir cómo llegan a transmitirse características del virus con una posible gran importancia biológica”, indica el Dr. Górgolas, que pone como ejemplo su sensibilidad a determinados fármacos, su capacidad de invasión y replicación. “También sirve -añade- para determinar cómo ha sido transmisión de la infección, remontándonos incluso hasta el inicio de la epidemia”.
La situación del VIH a nivel global
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que actualmente hay en el mundo unos 37 millones de personas infectadas por VIH, distribuidas en todos los continentes, pero con una mayor prevalencia en África Subsahariana. Desde la Fundación Jiménez Díaz, el Dr. Górgolas explica que “la tendencia en el número de nuevas infecciones está estabilizada, pero no desciende todo lo rápido que fuera deseable, teniendo en cuenta que, hoy en día, sabemos que los pacientes que reciben un tratamiento eficaz no transmiten la infección”. “Además, existen otras estrategias disponibles para evitar el contagio, que van desde el uso de preservativos al empleo de la profilaxis pre-exposición (Prep), consistente en la toma de un medicamento diario para evitar el contagio, si uno mantiene relaciones sexuales de riesgo”, apunta.
A la luz de este escenario, y con el fin de que los países en vías de desarrollo puedan elaborar nuevos fármacos para mejorar la vida de los pacientes con infección por VIH a un precio de coste asequible, concluye el especialista, “diferentes compañías farmacéuticas, entre ellas, ViiV Healthcare, colaboradora en las jornadas, han liberado sus licencias y patentes”.