“¿En serio esto es de verdad? ¿Son de la secreta?”, se preguntaba una persona desde su balcón mientras grababa cómo los Mossos y la policía nacional interceptaba una furgoneta en la que podría haber huido Younes Abouyaaqoub. Los nervios de la persona que grabó el vídeo son patentes en sus palabras.
Las imágenes muestran cómo los agentes se alejan rápidamente de la furgoneta tras comprobar su interior. Y es que podría parecer que tuviera explosivos, aunque minutos después se confirmaba que el terrorista no portaba ninguno.
La caza a Younes empezaba unas horas antes. Los Mossos y el resto de cuerpos de fuerza y seguridad del Estado hacían pública un par de imágenes del terrorista huido, a fin de encontrar colaboración ciudadana. Gracias a ello, se pudo abatir a la persona más buscada de los últimos días.
Cuatro días después de fugarse tras atentar en La Rambla, donde mató a 13 personas, y de asesinar después a Pau Pérez, Younes Abouyaaqoub fue reconocido en Subirats, a 45 kilómetros de donde cometió la matanza.
El principio de su fin comenzaba a las 15:30 horas. Una mujer llamaba a la comisaría de Sant Sadurní d’Anoia, en Barcelona, asegurando haber visto al sospechoso. La mujer dijo estar cien por cien segura de que el hombre que había visto era Younes, quien vestía con manga larga y abrigado pese a las altas temperaturas. Su descripción coincidía con la que habían dado los jefes a sus agentes tras observar al terrorista cerca de la estación de Cercanías. El cerco se estrechaba sobre él.
A las 16:11 horas, una unidad de Seguridad Ciudadana dedicada a tareas rurales encontraba a Younes solo y escondido entre unos viñedos. Al pedirle que se identificara, el terrorista se abría la camisa y mostraba un cinturón de explosivos que, después, se supo que era falso. Antes de morir abatido por los Mossos, no dudó en gritar “Alá es grande”. Los Mossos encontraron después en su cuerpo sin vida varios cuchillos.
Todavía falta por saber dónde ha pasado estos cuatro días de fuga y dónde consiguió la ropa que llevaba, además de qué pretendía hacer en esa zona de Cataluña.
Con su muerte, se cierra la célula yihadista que atentó en Barcelona y Cambrils el pasado jueves y que se saldó con la muerte de 15 personas y más de 130 personas heridas.