Mientras el Gobierno de Rajoy espera a que Puigdemont comunique oficialmente si ha declarado la independencia o no, los mecanismos de la Generalitat para crear el entramado de lo que sería un nuevo Estado catalán en forma de República siguen adelante.
Lo último ha sido conocer que desde el Gobierno catalán ya tienen lista la sustitución del Estado español por una Administración digital en la que se trabaja desde hace dos años. Según publica ‘El País’ este sábado, es un proyecto del consorcio de Administración Oberta de Catalunya, que depende de la Generalitat.
El modelo en el que se han fijado es el de Estonia, al que han copiado su estilo de gobernanza vía Internet. Así lo demuestra la documentación que se incautó el pasado 21 de septiembre durante los registros llevados a cabo por la Guardia Civil en diversos puntos pertenecientes a la Generalitat.
En su Cataluña independiente en Internet, ya se está elaborando el registro civil, integrado dentro de lo que llaman Administración Digital de la Nación. Sólo cinco días antes del referéndum ilegal, Puigdemont aprobó el Plan de Acción del Pacto Nacional para la Sociedad Digital, que es canalizador de esas medidas cruciales para consumar la independencia administrativa. Así, el Estado independiente de Cataluña avanzaría por el entorno de Internet de manera discreta y sin trabas.
Pese a no haber aún una respuesta clara de Puigdemont sobre la DUI, que dejó en suspenso, el Gobierno de Cataluña sigue trabajando a pleno rendimiento para que la desconexión, al menos digital, sea una realidad.