David Serrano, dueño del pozo de Totalán donde murió el pequeño Julen en enero de este año, ha concedido una entrevista a ‘El Programa del Verano’ (Telecinco) en la que ataca de manera muy dura a los padres del pequeño. Son sus primeras palabras tras la decisión de la juez, que ha decidido juzgarle por homicidio imprudente al no haber tapado el pozo. Él, por su parte, acusa a los padres del niño de ser “culpables por no estar atentos de su hijo”.
“Culpable soy yo, culpable son sus padres por no estar atentos de su hijo”, ha dicho Serrano. Todo ello después de que la juez haya concluido que tiene que sentarse en el banquillo de los acusados. La razón no es otra que dejar el pozo abierto por el que el niño de 2 años se cayó. Lo que le provocó la muerte.
Serrano considera que es injusto que se le juzgue por homicidio imprudente. Y es que, como recuerda, “mi niña chiquitilla también estaba, pero mi niña chiquitilla estaba al cuidado de su madre”. “Ellos tendrían que haber estado pendiente de su hijo”, concluye con dureza.
Consciente, asegura, de que la juez va a por él, Serrano ha afirmado también que “los padres [de Julen] están poseídos”. Y justifica su argumento: “Van chillando por ahí que yo soy el asesino de su hijo en el barrio”.
El dueño del pozo se queja de ser el único investigado, “cuando allí había cuatro personas incluidas esos dos niños”. “El hombre que genera el peligro que es el pocero tampoco está imputado. Se le coge un testimonio como un mero testigo cuando es él el que general el peligro”, ha dicho.
La teoría de la piqueta
Durante su entrevista, Serrano ha recuperado la teoría de la piqueta. El informe encargado por sus abogados aseguraba que el niño había muerto por el golpe de un pico durante las primeras horas del rescate.
“En la autopsia definitiva la piqueta sale mentada y sale mentada con el argumento que mi abogado dio. En el informe final la piqueta sale mencionada como que causó esas heridas pero que las heridas eran post muerte, una vez que el niño había fallecido”.
Sin embargo, parece que no se tendrá en cuenta. El juzgado de Instrucción número 9 de Málaga ha dispuesto que las actuaciones sigan por el trámite de procedimiento abreviado contra el dueño del pozo, al existir indicios de criminalidad tras dejarlo abierto.