El primer capítulo de ‘Secretos de Estado’ se estrenó cómodo ante la audiencia. Con un 15,7% de share y una media de 2.166.000 espectadores, la serie de Telecinco arranca con éxito y superando a sus rivales.
Así, dio la estocada a una floja ‘Matadero’ en Antena 3 (9,8% y 1.396.000 espectadores) y supera de largo al mínimo de ‘Maestros de la costura’ en TVE (10,1% y 1.230.000 espectadores). Por su parte, ‘Carretera y Manta’ se queda en un 6,2% y 836.000 espectadores en La Sexta. Supera, sin embargo a ‘Héroes’ en Cuatro, que cierra temporada sin hacer ruido (4,7% y 585.000 espectadores).
Incluso con el partido de Champions entre el Real Madrid y el Ajax, ‘Secretos de Estado’ logra reunir a más de 2 millones de espectadores que pudieron seguir un primer capítulo trepidante. Y es que ya sólo el comienzo es un punto de partida sorprendente.
Sin duda, esa fue una de las claves de su triunfo, unido a otras como la trama potente o el gran elenco de actores.
1. Inicio sorprendente
La serie arrancó con el intento de asesinato al presidente del Gobierno, ‘Alberto Guzmán’ (Emmanuel Esparza). Líder de su partido, político estrella y aparentemente marido y padre ejemplar. Sin embargo, durante uno de sus encuentros sexuales con ‘Paula’, su jefa de prensa, comienza a ahogarse. Tras llamar al médico, se descubre que alguien ha intentado envenenarle con cianuro. Y su amante es la principal sospechosa.
2. Trama potente
Si ya el inicio es de por sí sorprendente, la trama en general de ‘Secretos de Estado’ promete emociones fuertes. Una historia de ambición y pasión. El gabinete del presidente y su mujer, claves principales de ello.
3. Elenco de lujo
Todo el reparto consta de caras muy conocidas ya para el público. Destaca su pareja protagonista, Emmanuel Esparza y Miryam Gallego. Ésta última regresa a televisión tras interpretar a la malvada ‘Lucrecia’ en ‘Águila Roja’. Ellos encabezan un elenco que une años de experiencia con talento juvenil, formado por Michelle Calvó, José Luis García Pérez, Jesús Castro y Miquel Fernández entre otros.
4. Ritmo trepidante
La serie viaja al pasado en numerosas ocasiones y goza del ritmo trepidante propio de un thriller. Dinamismo y flashbacks que sitúan al espectador en la mente de cada uno de los personajes.
5. Corrupción política vs. historias de amor
‘Secretos de Estado’ es de las primeras producciones españolas que se atreve a tocar la política. En su caso, la corrupción en forma de engaño y traición es la principal clave.
A ello hay que sumar las historias de amor y pasión, que son parte fundamental en la trama. Desde la relación extramatrimonial del presidente con su jefa de prensa al ‘tonteo’ adolescente de la hija del líder del Gobierno con el jefe de seguridad.
Además de todas estas claves, los escenarios naturales, encabezados por el Palacio Villalís, que reproduce las estancias de la residencia presidencial, o la Real Academia de Farmacia, son parte fundamental en la trama. Lo que dota a la serie de un ambiente y fotografía pocas veces visto en televisión.