El Consejo del BCE ha aprobado ya un programa especial de emergencia para combatir la pandemia del coronavirus. Se trata de la adquisición de activos públicos y privados con un alcance de 750.000 millones de euros. Estará en vigor hasta finales de 2020, según ha anunciado la entidad.
Es un plan que intenta rectificar la tibieza con la que el BCE ha tratado esta crisis. La semana pasada, por ejemplo, decepcionó a los mercados al movilizar únicamente 120.000 millones.
Con este nuevo programa de compras, acordado en una reunión de emergencia, el BCE quiere contrarrestar los riesgos de transmisión de su política monetaria. La institución que preside Christine Lagarde puntualiza que «no tolerará ningún riesgo en la transmisión de la política monetaria en todas las jurisdicciones de la Eurozona».
El BCE confía en que este plan sea suficiente para que la parálisis económica de la Eurozona sea pasajera.
Hasta finales de año
Las compras se efectuarán hasta finales de 2020. Lo que da margen a las economías la zona Euro. Sobre todo, a las del sur como la española y la italiana, muy castigadas por el coronavirus.
La medida ha sido acogida con alivio por los gobiernos, que reclamaban desde hacía días una respuesta contundente del BCE. Sobre todo, después de que Trump liberara 50.000 millones de dólares de la Reserva Federal.