El Hospital Universitario Rey Juan Carlos -integrado en la red pública madrileña (Sermas)-, acogió recientemente la celebración del 33 congreso anual de la Sociedad Matritense de Cirugía Ortopédica y Traumatología (Somacot), cuyo enfoque científico estuvo orientado a la actualización quirúrgica en diferentes patologías traumatológicas prevalentes en la práctica clínica.
“El congreso ha sido punto de encuentro de los médicos residentes y especialistas de la Comunidad de Madrid de la especialidad de Cirugía Ortopédica y Traumatología, y ha tenido una gran acogida” y éxito en cuanto a organización, desarrollo y asistencia, afirma el Doctor David Sáez, jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología en el hospital mostoleño y presidente de la reunión que, al celebrarse en este centro, ha confirmado la referencia que constituye en esta especialidad a nivel regional.
Orientación profesional
En la edición de este año, la puesta en común de conocimiento sobre las patologías de las diferentes áreas anatómicas no fue el único foco, ya que el congreso incluyó una parte muy importante, y a menudo olvidada en este tipo de encuentros, centrada en la orientación profesional a través de una mesa de debate de asuntos laborales en la que se trataron diversos aspectos de la práctica de la Cirugía Ortopédica y Traumatología en la región madrileña.
De hecho, la conferencia magistral de la reunión, titulada “De Madrid al cielo” e impartida por el Doctor Joaquín Sánchez Sotelo, jefe de la Unidad de Hombro y Codo de la Clínica Mayo, se enfocó precisamente en esta cuestión. El especialista puso de manifiesto en el evento de la Somacot la importancia de los mentores en el proceso de formación y desarrollo profesional, el legado que se puede aportar a la sociedad y a los pacientes a través de la investigación, y la necesidad de encontrar un equilibrio entre el desempeño de la profesión y el resto de las facetas de la vida.
Formación e investigación
“Una de las principales actividades de las sociedades científicas ha de ser la formación. Por ello, es importante poner en valor el nivel de excelencia de los especialistas y formar a las nuevas generaciones para incentivar el conocimiento y la investigación”, asegura por su parte la Doctora Gia Rodríguez, especialista de hombro y codo y jefa de la Unidad de Artroscopia del Rey Juan Carlos, además de secretaria del Comité Organizador y coordinadora del Comité Científico del congreso.
Esta edición del congreso de la Somacot incluyó otra novedad: una mesa redonda llamada “Madrid Publica” formada por cinco ponencias sobre trabajos de investigación de especialistas madrileños publicados en revistas internacionales de alto impacto.
En esta línea se entregaron premios tanto al mejor póster, como un primer y segundo premio a las mejores comunicaciones orales. El residente del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, el Doctor Santiago Gabardo, ganó el primer premio «Profesor Palacios Carvajal» por su investigación titulada «Factores demográficos y radiológicos que afectan negativamente el tratamiento conservador de las roturas degenerativas del supraespinoso». Por otro lado, el Doctor Fernando Cabanes, residente del Hospital Universitario Rey Juan Carlos, se llevó el segundo premio a la mejor comunicación por su trabajo titulado «Resultados clínicos a medio plazo de la liberación artroscópica del pectoral menor».
Programa científico
El 33 congreso anual de la Somacot presentó un programa científico que contó con la participación de ponentes de primer orden, entre ellos numerosos profesionales del hospital mostoleño, así como de los hospitales universitarios Fundación Jiménez Díaz, Infanta Elena y General de Villalba. Asimismo, acogió diversas e interesantes mesas redondas, talleres y conferencias magistrales que permitieron conocer las últimas innovaciones científicas en cuanto a técnicas y procedimientos quirúrgicos de la Cirugía Ortopédica y la Traumatología. De esta forma, se abordaron los temas más relevantes de las diferentes áreas anatómicas: rodilla, pie y tobillo, mano y muñeca, cadera, hombro y columna, en las diferentes mesas redondas.
“Nuestro congreso resulta, una vez más, el espacio ideal para establecer nuevas relaciones profesionales y reencontrarnos con nuevos y viejos compañeros, además de fomentar la participación e integración de jóvenes traumatólogos que se incorporan a nuestro colectivo y representan el futuro de nuestra especialidad”, concluye el Doctor Sáez.
