Serán cinco días de viaje y cuatro países. Pedro Sánchez ha hecho las maletas y ha aterrizado primero en Chile, donde arranca una gira por Latinoamérica con la que busca un objetivo claro: subsanar el déficit de España allí.
Y es que el presidente español considera que los gobiernos anteriores han dado de lado a ciertas regiones latinoamericanas, que él esperar recuperar ahora. Ofrecerá, además, respaldo a las empresas y cooperantes españoles que viven allí. La situación en Venezuela y Nicaragua, la próxima Cumbre Iberoamericana y, por supuesto, las relaciones bilaterales serán los temas que estén encima de la mesa.
La primera parada de Sánchez ha sido Chile. Allí se ha encontrado ya con su homólogo, Sebastián Piñera. Ambos han mantenido una reunión en el Palacio de la Moneda.
Este martes, y tras un desayuno de trabajo con empresarios españoles afincados en Chile, se entrevistará con los presidente del Congreso y el Senado chilenos. Y se reunirá con el jefe del área internacional del Partido Socialista chileno. Un encuentro con representantes de la colonia española en el país pondrá fin a su estancia allí.
Será por la tarde cuando se desplace hasta Bolivia. Junto a Evo Morales firmará un acuerdo que permitirá el desembarco de empresas e inversiones españolas. Concretamente, en el megaproyecto del tren que atravesará el país.
Recuperar espacio
Sin duda, Pedro Sánchez busca dar su espacio a España en algunos países que anteriores gobiernos han tenido ‘abandonados’. Por ejemplo, será la primera vez en 20 años que un presidente español visite Bolivia.
Además, el líder del Ejecutivo ha elegido cuatro países con gobiernos de distinto color e ideología.