Josep Borrell presentaba en ‘Espejo Público’ su libro ‘Las cuentas y los cuentos de la independencia’ en el año 2015 cuando ya vaticinó lo que pasa hoy en día en Cataluña: la fuga de la banca y las empresas.
Antes de abordar los temas de su libro, Susanna Griso le preguntaba por las consecuencias que tendría la advertencia que entonces lanzaba la banca asegurando que habría inseguridad jurídica, que Cataluña se quedaría fuera de la UE y que Banco Sabadell y Caixabank reconsiderarían quedarse en Cataluña.
Tras ver la reacción de Artur Mas en un vídeo que ahora también se ha recuperado, negando que la banca fuera a marcharse, Borrell aseguraba que él ya llevaba diciendo lo mismo que los bancos desde hacía años. «Es una pena que hayan tardado tanto en decirlo. Forma parte de este silencio culposo y temeroso que se ha instalado en la sociedad catalana», decía entonces, lamentando que aquellos que se atrevieron a decirlo habían sufrido una auténtica campaña de desprestigio.
«Nos decían que éramos unos mentirosos», comentaba un Borrell que puntualizaba que Cataluña seguiría teniendo un sistema bancario pero que los bancos tendrían que tener la sede principal en España para poder acceder a la liquidez del Banco Central Europeo.
El exministro de Obras Públicas explicaba también que el independentismo era pura fe y religión, después de que Europa dijera que se quedarían fuera. «Siguen apelando a la magia. ‘No se preocupen que no nos van a expulsar’. La misma palabra expulsar forma parte de esta campaña (…) No nos van a meter en un barco a los catalanes y nos van a sacar de la Península Ibérica. Simplemente van a dejar de aplicar las políticas comunitarias. Y eso es fácil y rápido. Y eso lo argumentan con magia», decía por entonces Borrell.
En el resto de su entrevista, Borrell también negaba que pudieran cambiarse los tratados de la UE tan fácilmente como vendían los independentistas en Cataluña.
Los pronósticos de Borrell se han hecho virales de nuevo, pese a que hace dos años ya que vaticinó que la banca y las empresas se marcharían de Cataluña.