El ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, ha convocado al embajador argentino en Madrid, Roberto Bosch, en un esfuerzo por gestionar la creciente crisis diplomática entre España y Argentina. Esta acción se produce después de que el presidente argentino, Javier Milei, profiriera insultos contra el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y su esposa, Begoña Gómez, durante un mitin de Vox en Madrid. Milei calificó a Gómez de «corrupta» y arremetió contra Sánchez y las instituciones españolas, lo que ha provocado una fuerte reacción del gobierno español.
Albares ha subrayado que el Ejecutivo tomará «medidas oportunas» si no recibe disculpas públicas de Milei. Sin embargo, varios ministros del gobierno de Milei, incluyendo el portavoz presidencial Manuel Adorni y el ministro del Interior Guillermo Francos, han descartado la posibilidad de disculparse. Adorni señaló que Milei no mencionó directamente a Gómez y que, en su opinión, debería ser el gobierno español quien pidiera disculpas por las críticas hacia Milei. Francos, por su parte, minimizó la situación al afirmar que no hay una crisis con España, sino solo una discusión con el presidente Sánchez.
Crisis diplomática
La situación ha escalado con la llamada a consultas de la embajadora de España en Buenos Aires, María Jesús Alonso Jiménez, dejando la embajada sin su máxima autoridad. Esta medida, junto con la convocatoria del embajador argentino, indica la seriedad con la que el gobierno español está manejando la crisis.
El Partido Popular (PP) ha cambiado su postura inicial, calificando ahora los comentarios de Milei como una «intromisión» en la política nacional, aunque también critican al gobierno español por exagerar la reacción. Esteban González Pons, vicesecretario Institucional del PP, ha acusado al gobierno de Sánchez de utilizar esta situación para convertir un ataque a su esposa en una cuestión de Estado.
Albares ha manifestado su decepción con el PP por no defender las instituciones españolas y ha exigido disculpas a los dirigentes de Vox, que aplaudieron a Milei durante el mitin. Además, ha desmentido las acusaciones del PP de no haberles informado sobre negociaciones y crisis diplomáticas previas, instando al partido a apoyar las instituciones nacionales en lugar de politizar el incidente.
El ministro no ha especificado qué medidas adicionales tomará España si Milei no se disculpa, pero ha indicado que las acciones no afectarán a los ciudadanos de Argentina. Una posible medida es no facilitar la próxima visita de Milei a España, prevista para el 21 de junio para recibir un premio del instituto Juan de Mariana, en contraste con las facilidades otorgadas en su reciente visita.