Partido Popular y Ciudadanos, socios de gobierno en Andalucía, han cerrado un «acuerdo de garantía de estabilidad» en el Ejecutivo para agotar la legislatura en el que incluyen, entre otros puntos, el compromiso de no aceptar ningún trasvase de cargos públicos en la comunidad hasta que se produzcan las próximas elecciones regionales.
El acuerdo ha sido presentado este martes en rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno por el vicepresidente, Juan Marín (Cs), y el portavoz y consejero de la Presidencia, Elías Bendodo (PP), que han escenificado así la «unidad» que quieren trasladar con el pacto.
Ambos representantes andaluces han asegurado que esta medida está hablada y respaldada por las direcciones nacionales de sus partidos
Marín ha explicado que en Andalucía «cualquier persona que esté en un cargo electo o de representación de algún tipo» que quisiera irse de Cs al PP o al revés estaría incumpliendo ese acuerdo, por lo que el partido receptor no lo aceptaría en sus filas.
El acuerdo, que se presenta como «una extensión» del pacto de gobierno que firmaron hace dos años, especifica que por «respeto a la autonomía» de los dos partidos se comprometen a que «no se produzcan ningún trasvase de cargos de las formaciones políticas con representación parlamentaria».
Además, se acuerda agotar la legislatura, «blindar» la sanidad, la educación y las políticas sociales, cumplir «la hoja de ruta económica» con un segundo plan de apoyo para los sectores afectados y profundizar en la «regeneración democrática y política de reformas tras décadas de mala gestión y corrupción» socialista.