El canciller alemán, Olaf Scholz, calificó hoy de «correcta» la propuesta de la Comisión Europea de reducir en un 15 % el consumo del gas natural, afirmó que «muchos estados miembros» están ya actuando en esa dirección y pidió solidaridad europea en este asunto.
«La solidaridad europea debe regir para todos», añadió el líder alemán, que confirmó así el apoyo expresado ayer a la propuesta de la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, por su vicecanciller y ministro de Economía, el verde Robert Habeck.
El plan de la CE topa con el rechazo de España, Portugal y Grecia, que consideran que tal reducción compete a los países altamente dependientes de los suministros del gas ruso, mientras que Polonia también ha expresado su oposición y considera que no responde a una «solidaridad real».
Scholz responde a Ribera
La CE contempla propuestas «diferenciadas», afirmó Scholz, preguntado por la posición de rechazo expresado por la ministra española de Transición Ecológica, Teresa Ribera, quien respondió, en dirección a Bruselas, que los españoles «no han vivido por encima de sus posibilidades» en materia energética.
«Todos estamos confrontados a grandes retos, ningún país puede decir que subida precios no les tocan y que no le afectan los retos relacionados con gas», insistió el canciller. La propuesta elaborada por la CE, que está pendiente de la aprobación de los Veintisiete por una mayoría simple, tiene «propuestas diferenciadas, que tiene en cuenta el consumo, las estructuras de importación», por lo que es, a juicio de Scholz, equilibrada, además de contemplar situaciones como la de la península ibérica.
«Veo las discusiones con optimismo y estoy convencido de que primará la solidaridad comunitaria», afirmó, para añadir que el problema generado por los suministros de gas ruso es algo «global» y «no de un solo país».