El Gobierno ha confirmado este jueves la venta de 400 bombas de precisión a Arabia Saudí. El ministro de Exteriores, Josep Borrell, ha asegurado que han estudiado ese envío durante una semana y no detectan “ninguna irregularidad”. El titular de Exteriores ha admitido en declaraciones en Onda Cero que el Ejecutivo “no ha encontrado ninguna razón” para no cumplir con la entrega de las armas. Y recuerda que se cumple un contrato firmado en 2015 por el anterior Gobierno de Mariano Rajoy.
Esta confirmación de que se hará la venta llega después de que el lunes 3 de septiembre se informara de que el Ministerio de Defensa tenía intención de paralizar esa venta bajo el argumento de que éstas no pudieran ser utilizadas por los saudíes en la guerra que se está librando en Yemen.
La ministra Margarita Robles, desautorizada
El departamento que dirige Margarita Robles había iniciado los trámites para dejar sin efecto el contrato suscrito por el exministro Pedro Morenés, devolviendo los 9,2 millones de euros que ya se han pagado por este material militar.
Mientras las ONG aplaudieron el gesto del Gobierno, trabajadores del astillero de Navantia en San Fernando (Cádiz) salieron a protestar por el temor de que la paralización de la venta hiciera que el país árabe cancelase su contrato para construir corbetas. Incluso la presidenta andaluza, Susana Díaz, también el PSOE, recordó a Sánchez que su obligación era garantizar el empleo en la Bahía de Cádiz.
Después llegó la rectificación de la portavoz, Isabel Celáa, que abrió la puerta a replantearse la paralización de la venta. El Gobierno dijo entonces que sólo era una declaración de intenciones. Este jueves, diez días después, el ministro Borrell confirma que España venderá las 400 bombas a Arabia Saudí.