El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, Luis González Díez, considera que los farmacéuticos han dado un paso profesional decisivo durante la pandemia al prestar un servicio sanitario esencial a los ciudadanos en el momento más crítico para la sociedad y la sanidad españolas.
“El reto y la exigencia para nuestras autoridades sanitarias radica ahora en contar más con los farmacéuticos para mantener aquello que funciona y potenciar los servicios farmacéuticos que responden a las necesidades de los ciudadanos”, sostuvo ayer en el encuentro digital organizado por la revista ‘Farmaventas’, bajo el título ‘Evolución de la oficina de farmacia en 2021’.
Durante su intervención, Luis González señaló que “la nueva ley de farmacia ha sido aprobada por la pandemia de facto; al acercar, por ejemplo, el medicamento a los domicilios a las personas mayores, los farmacéuticos hemos hecho atención farmacéutica domiciliaria”.
En este sentido, avanzó que el Gobierno de la Comunidad de Madrid “ha dado su palabra de que todos los servicios que estamos prestando no van a desaparecer, es un compromiso que se recogerá en la futura Ley de Farmacia”.
El presidente del COFM recalcó el gran apoyo ciudadano que la profesión ha recibido durante la crisis, así como el refuerzo social de la imagen del farmacéutico y el nuevo interés que despierta el ejercicio profesional, “una muestra más de la confianza que la población tiene en sus farmacéuticos y que la profesión está obligada a poner en valor, después del paso adelante que los farmacéuticos hemos dado en Salud Púbica y en farmacia asistencial”. “Son nuevos roles y funciones que hemos llevado a cabo con resultados incuestionables”, subrayó.
Luis González recordó que la farmacia madrileña sigue “en tiempo de pandemia” y que el virus está condicionando la evolución del sector durante un ejercicio en el que el Colegio madrileño continúa movilizado al máximo “en el objetivo primero que es evitar contagios y salvar vidas”.
En la intervención en la mesa redonda que también contó con la participación de Luis de Palacio, presidente de FEFE; Gustavo Castro, director financiero de FarmaQuatrium; Olga Molina, responsable de Farmaverita; y la farmacéutica de farmacia rural, Irene González Orts; el presidente del COFM se refirió a la labor que los farmacéuticos madrileños están haciendo en la detección de contagios a través de test de antígenos, así como su participación en la campaña de vacunación contra el coronavirus como “dos hitos que están marcando la evolución de la profesión farmacéutica y que han contado con el apoyo del Gobierno de la Comunidad de Madrid”.
La campaña de inmunización que lleva a cabo el Colegio, y que ya ha administrado la primera dosis de la vacuna a los 11.000 profesionales que trabajan en las oficinas de farmacia, “es un ejemplo de que estamos preparados para vacunar y para trabajar junto al resto de los profesionales sanitarios en cualquier estrategia de vacunación”. “Médicos, enfermeros y farmacéuticos estamos colaborando unidos en esta iniciativa que es un ejemplo de una sanidad integral al servicio de los ciudadanos”, aseguró.
Además de trabajar en la integración de los farmacéuticos en los equipos de Atención Primaria, Luis González incidió en la “necesidad de identificar correctamente y a tiempo las necesidades de los pacientes y consumidores, porque van a ser las que marquen el devenir de la farmacia”.
Igualmente, advirtió de que “la farmacia no puede vivir con los actuales precios del medicamento”. Por ello, defendió la necesidad de potenciar la dermofarmacia, la nutrición y óptica de la farmacia, entre otras secciones, a través del consejo profesional especializado, así como apostar por mejorar la gestión empresarial para reforzar la rentabilidad de una farmacia que “no merece ni tampoco puede soportar ningún recorte más”, en referencia al ‘Plan de Acción para fomentar la utilización de los medicamentos genéricos y biosimilares en el SNS’ del Ministerio de Sanidad. Por último, recordó que factores como la transformación digital y tecnológica o los nuevos hábitos de consumo de los ciudadanos están cambiando la forma de relacionarnos y de hacer farmacia, por lo que invitó a los farmacéuticos a invertir en estas tendencias, sin olvidar que “la cercanía y nuestra atención personal y consejo profesional constituyen el gran valor diferencial de la Farmacia”.