Las cinco naciones emergentes que forman el grupo de los BRICS, Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, abordaron en una cumbre la crítica situación en Gaza. La reunión, enfocada en el reciente conflicto entre Israel y Hamás, contó con discursos notables de Xi Jinping y Vladimir Putin, entre otros líderes del BRICS.
Xi Jinping, desde Pekín, pidió un cese al fuego y la apertura de corredores humanitarios para los palestinos, prometiendo mayor asistencia china a Gaza. China, en colaboración con Egipto, ya ha enviado ayuda significativa. Xi enfatizó la importancia de una solución de dos Estados y convocó a una conferencia internacional de paz, argumentando que la paz duradera solo es posible con una resolución justa para Palestina.
En Moscú, Vladimir Putin subrayó el papel potencial de los BRICS en alcanzar un alto al fuego en la región. Criticó a Israel por su supuesto sabotaje de las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU y expresó su preocupación por la situación humanitaria en Palestina.
Cyril Ramaphosa, presidente de Sudáfrica y anfitrión de la cumbre, acusó a Israel de crímenes de guerra y genocidio en Gaza. De hecho, comparó la situación palestina con la lucha contra el apartheid, instando a una acción unificada para resolver esta «injusticia histórica». Recientemente, su gobierno pidió a la Corte Penal Internacional emitir una orden de arresto contra el primer ministro israelí.
Presión diplomática sobre Israel
Asimismo, la cumbre también contó con la participación de representantes de cinco nuevos miembros (Arabia Saudí, Argentina, Etiopía, Irán y Emiratos Árabes Unidos) y del secretario general de la ONU, António Guterres. Mohammed bin Salman de Arabia Saudí hizo un llamado global para detener las exportaciones de armas a Israel.
La ausencia notable fue la de Narendra Modi, primer ministro de India, quien envió a su ministro de Exteriores en su lugar. Esta decisión refleja la incomodidad de India con el enfoque crítico hacia Israel, alineándose más con Estados Unidos y absteniéndose de demandar un alto al fuego.
La cumbre BRICS sobre la situación desencadenada en Gaza por el conflicto entre Israel y Hamás marca un cambio en la diplomacia global, destacando el creciente peso de estos países en el escenario internacional y su voluntad de abordar conflictos como el de Oriente Próximo de manera más activa y desafiante frente a las posturas occidentales.