La Casa Blanca ha anunciado una nueva serie de normas para la prensa que acuda a las ruedas de prensa. Especialmente, las que tengan a Trump como protagonista. Todo ello después de devolver la acreditación a la CNN tras el escándalo con Jim Acosta.
En un comunicado, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, ha asegurado que el Gobierno ha creado nuevas normas debido a la posición que ha adoptado CNN. Se refería así a la demanda interpuesta a la propia Casa Blanca tras suspender ésta la acreditación de prensa a Acosta.
A partir de ahora, los periodistas podrán hacer solo una pregunta. Después, tendrán que dejar al resto hacer lo propio.
Además, sólo podrán repreguntar sobre el mismo tema si son autorizados a ello. Si no se cumplen esas normas, advierte la Casa Blanca, los periodistas serán suspendidos de sus acreditaciones.
Sanders añadía que los periodistas tendrán que entregar «físicamente» el micrófono para que pueda utilizarlo otro compañero. Algo que hace referencia específica al forcejeo entre Acosta y una asistente de la Administración cuando el periodista quiso seguir preguntando.
«Hemos creado estas reglas con cierta renuencia. Pero dada la posición tomada por la CNN, nos sentimos obligados a reemplazar las prácticas compartidas previamente con reglas explícitas», decía Sanders.
Serán normas que solo afectarán a ruedas de prensa formales. No entra en ellas las preguntas en espacios abiertos o en el avión privado presidencial.
Litigio zanjado
Por su parte, la cadena CNN ha dado por zanjado su litigio con Trump. «Hoy la Casa Blanca ha restaurado por completo la acreditación de prensa a Acosta. Como resultado, nuestra demanda ya no es necesaria. Estamos deseando continuar cubriendo la Casa Blanca», escribían en Twitter.