“Existe evidencia abrumadora” de que la inhalación del virus del Covid-19 a través de pequeñas gotitas conocidas como aerosoles representan “una importante vía de transmisión de la enfermedad”. Así lo alerta un grupo de científicos estadounidenses liderados por Kimberly A. Prather, del Instituto Scripps de Oceanografía (Estados Unidos).
En la revista científica Science, los investigadores emiten una carta explicando que el coronavirus se transmite en espacios cerrados normales, más allá de los entornos donde se realizan procedimientos médicos con aerosoles. Así los expertos lanzan un consejo a las autoridades españolas para la estrategia del Gobierno presidido por Pedro Sánchez para afrontar la nueva normalidad que, en realidad, es ya segunda ola de la pandemia del Covid-19.
El virus en aerosoles está altamente concentrado cerca de una persona infectada, y pueden infectar más fácilmente a las personas que están a su lado
La explicación que aportan estos científicos es que los virus en gotitas típicamente caen al suelo en segundos a dos metros de la fuente y pueden ser rociados como pequeñas balas de cañón sobre las personas cercanas. Debido a su limitado alcance de desplazamiento, el distanciamiento físico reduce la exposición a estas gotitas.
En cambio, los virus en aerosoles, que son gotas tan pequeñas que la fuerza de la gravedad no puede con ellas y quedan suspendidas, son menores de cinco micras y pueden permanecer suspendidos en el aire durante muchos segundos u horas, como el humo, y ser inhalados. Están altamente concentrados cerca de una persona infectada, por lo que pueden infectar más fácilmente a las personas que están a su lado.
Más medidas de protección
En las fases de desescalada diseñadas en mayo para salir del estado de alarma, durante la primera ola, se puso el foco en tres medidas: distancia de 1,5 metros, lavado de manos y mascarilla. Estas ‘tres emes’ en las que a día de hoy sigue insistiendo el ministro de Sanidad, Salvador Illa, no transmiten la importancia de realizar las actividades en exteriores con el riesgo que ha demostrado la ciencia.
Los científicos estadounidenses instan a los responsables de salud pública a articular la importancia de trasladar las actividades al exterior
Los científicos estadounidenses, además del uso de mascarillas, la distancia de seguridad y los esfuerzos de higiene, instan a los responsables de salud pública a “articular la importancia de trasladar las actividades al exterior, mejorar el aire interior utilizando la ventilación y la filtración, y mejorar la protección de los trabajadores de alto riesgo”. Además, el equipo liderado por Prather también pide “armonizar los debates sobre los modos de transmisión del virus en todas las disciplinas a fin de garantizar las estrategias de control más eficaces y proporcionar una orientación clara y coherente al público”.