El Gobierno de Italia ha decidido contentar a Bruselas y recortar su llamado ‘Presupuesto del pueblo’. Aunque eso incida, directamente, en algunas de sus propuestas estrella. El Ejecutivo italiano ha formalizado la nueva Ley de Presupuesto, apurando el plazo para ser aprobado por la Comisión Europea de cuentas.
El déficit se sitúa en el 2,04% del PIB, como se anunció la semana pasada, pero siguen faltando medidas que lo garanticen.
Aunque hace dos meses aseguraron que no aceptarían los términos de Bruselas, finalmente han tenido que ceder. El llamado ‘Presupuesto del pueblo’, que recogía algunas de sus propuestas estrella, quedará recortado.
La presión de los mercados, el enfado de los empresarios y el atisbo de desaceleración económica ha podido con una de las grandes promesas electorales del Gobierno de Conte.
Aprobación de Bruselas
Bruselas aún tiene que pronunciarse sobre este borrador. De momento, han logrado que Salvini y Di Maio reculen y acepten tocar las partidas destinadas a sus propuestas estrella. Entre ellas, la reforma de la ley de las pensiones y la renta ciudadana.
La propuesta tiene que convertirse ahora en ley antes del 31 de diciembre. Y el viernes debería votarse en las Cámaras. Todo ello a la espera del sí de Bruselas.
