El Parlamento británico ha decidido bloquear el Brexit duro o sin acuerdo. Una salida impulsada por Boris Johnson, que ahora se ha quedado sin el control de la misma. El primer ministro ha perdido la mayoría parlamentaria y ha anticipado que convocará elecciones anticipadas.
Por 328 votos a favor y 301 en contra, con la fuga de varios diputados conservadores ‘rebeldes’, la Cámara de los Comunes aprobó la ley impulsada por la oposición laborista que limita la capacidad del Gobierno y fuerza una extensión del Brexit hasta enero del 2020 si no prosperan las negociaciones con Bruselas.
Tras encajar la derrota, Johnson adelantaba que convocará elecciones. El ‘premier’ ha rechazado la ley aprobada en el Parlamento «porque sólo servirá para crear más confusión y más retrasos». Y retó personalmente al líder de la oposición, Jeremy Corbyn, a medirse con él en las urnas.
Tránsfugas
La votación crucial estuvo protagonizada por los tránsfugas. En especial, por el conservador Phillip Lee, que se pasó a las filas del Partido Liberal Demócrata, privando así a Johnson de la mayoría que tenía asegurada hasta ahora.
Lee abandonó a los ‘tories’ acusando a Johnson de «manipulaciones, intimidaciones y mentiras». «Este no es el partido al que me afilié hace 27 años», dijo. Su marcha deja a conservadores y unionistas con 319 diputados, frente a los 320 de los grupos de la oposición. «Este es un partido que se está inclinando peligrosamente hacia el nacionalismo y el populismo», concluyó en el momento de su deserción.
Además, aseguró que habrá más tránsfugas por la intención de Johnson de culminar el Brexit el 31 de octubre, «pase lo que pase y si es necesario sin acuerdo».