La canciller alemana, Angela Merkel, se despidió este viernes 22 de octubre de Bruselas, al término de la que seguramente haya sido su última cumbre europea, la número 107 en sus 16 años como líder de Alemania y de la Unión Europea.
«Este ha sido quizás mi último Consejo Europeo. Para mí siempre fue un placer», dijo Merkel desde la sala de prensa donde desde 2005 se ha encargado de explicar el resultado de largas reuniones en las que ella ha sido una pieza fundamental para que los líderes europeos alcanzaran un acuerdo.
Despedida emotiva en la que sus ‘colegas’ europeos han resaltado su capacidad para lograr acuerdos
Así se lo reconoció hoy el primer ministro luxemburgués, Xavier Bettel, que ha compartido con la canciller los últimos ocho años: «A menudo, cuando no era posible seguir adelante, entonces Merkel venía con una propuesta (…), lograba encontrar algo que nos unía para seguir yendo hacia adelante».
La dirigente alemana evitó hacer un balance de su mandato, pero sí concedió que a lo largo de estos años, ha «intentado resolver los problemas». Dificultades que se han sucedido una tras otra a lo largo de más de una década, desde la crisis financiera de 2008, pasando por la crisis migratoria de 2015, el Brexit o la pandemia de coronavirus.
Merkel se va dejando tras de sí una huella imborrable, hasta el punto de que el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, aseguró hoy que es «un monumento».
«Una cumbre sin Angela es como Roma sin el Vaticano o París sin la Torre Eiffel», dijo Michel en el discurso de despedida que dedicó a la canciller en la sala de reuniones, donde el resto de líderes se levantaron para ovacionarla en aplausos.
Merkel se retira en un contexto político nacional e internacional incierto
Independientemente del resultado de las elecciones alemanas del pasado mes de septiembre, la todavía canciller se iba a retirar de la política activa. No obstante, seguro que hubiera preferido marcharse dejando a la Unión Demócrata Cristiana (CDU)-partido encabezado en los comicios por Armin Laschet- como ganadora; en vez de con una victoria socialdemócrata que, según las últimas informaciones, va a derivar en un Gobierno tripartito en el que la izquierda moderada alemana va a incluir a los verdes y a los liberales. La conocida como ‘coalición semáforo’.
En cuanto a la política europea, Merkel se despide de sus obligaciones continentales en pleno enfrentamiento entre la Comisión Europea y Polonia por el desafío del país polaco a las instituciones europeas; en concreto a las de Justicia, puesto que el primer ministro del país, Mateusz Morawiecki, ha manifestado en varias ocasiones que sus leyes nacionales están por encima de la jurisprudencia de la Unión Europea.
Por lo menos, la política conservadora se puede marchar con la relativa tranquilidad de que lo peor de la pandemia de la Covid-19 ya ha pasado.