Se acabó la estancia de Wes Anderson en España, al menos de momento, y que ha movilizado a buena parte de sus fans españoles hasta el pequeño pueblo madrileño. El director norteamericano abandona el pueblo que ha sido testigo del rodaje de ‘Asteroid City’, tras varias semanas rodando con estrellas mundialmente conocidas como Scarlett Johansson, Adrien Brody, Bryan Cranston, Tom Hanks y Margot Robbie. De esta manera, concluye así el rodaje principal de una película que ha traído Hollywood a España y que, en palabras de Francisco Javier Martínez, alcalde de Chinchón, dejará entre “tres y cuatro millones de euros”.
El título de esta película no se ha conocido hasta hace escasos días, cuando Bill Murray lo desveló en la premiere de La Crónica Francesa (The French Dispatch) celebrada en Londres la semana pasada. También se ha podido ver a miembros del equipo portar sudaderas promocionales en el que aparecía este título.
En Twitter, algunos usuarios como Ricardo Alvarado, autor de un hilo recopilatorio sobre el rodaje desde mayo, vaticinaban que podría ser un nombre interesante para la película tras un vídeo de Wes Anderson en la premiere de La Crónica Francesa.
Además, según Gregorio Belinchón, periodista de El País, que ha tenido acceso a fuentes del rodaje, ha escrito en Twitter que la fotografía principal ha acabado, lo cual significa que el rodaje principal también ha concluido. La despedida se produce a siete días del estreno de su última película, por lo que cabría esperar que su partida puede deberse a movimientos promocionales, como los producidos hasta ahora en el Festival de Cannes o en la reciente premiere británica en Londres.
Desde la oficina de prensa del rodaje de Wes Anderson, cuyo título será 'Asteroid City', cuentan: "Hoy se ha acabado la fotografía principal". Adiós a Chinchón
— Gregorio Belinchón (@gbelinchon) October 15, 2021
A falta de conocer todavía los detalles de la película, parece predecible que la película no será estrenada hasta finales de 2022, como ya aparece en el portal de cine IMBD, o incluso principios 2023. Lo que sí parece confirmado es que será una película de época, rodada en un paisaje desértico y con lo que podría ser una estación de tren, a tenor de los detalles que se dejan ver a lo lejos en los decorados construidos entre Chinchón y Colmenar de Oreja.
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