Bruselas anunciaba este pasado miércoles una nueva partida de ayudas para inmigración. De los 55 millones aprobados, alrededor de unos 30 irán a parar a Marruecos. Fondos insuficientes, aseguran desde Rabat, para contener la migración en sus fronteras. Desde el país africano reclaman más dinero y dejan claro los recursos que necesitan para poder hacer frente al volumen de migrantes.
«Estamos cansados de ser los malos. Desde Europa nos piden que frenemos las salidas de inmigrantes, pero no nos dan los medios suficientes para ello», se quejaban en la Fiesta del Trono, actos para conmemorar anualmente la proclamación como rey de Mohamed VI (que lleva ya 19 años).
Desde el ministerio del Interior marroquí dejan caer que necesitarían el doble de los recursos que ofrece la UE. Con soldados a los que les falta formación en contención, reclaman también más barcos, lanchas y helicópteros. Todos ellos equipados con una tecnología capaz de detectar pateras. Recursos con los que ahora mismo no cuentan.
En España, el Gobierno está llevando a cabo una intensa campaña para apoyar las peticiones de Marruecos. De hecho, se espera cerrar en los próximos días un encuentro entre Pedro Sánchez y Mohamed VI. Reunión que estaría centrada en la migración y que podría producirse a finales de agosto o primeros de septiembre.
Refuerzo de la seguridad
Marruecos defiende su trabajo en las fronteras y culpa al cierre de la ruta entre Libia e Italia el aumento de inmigrantes en su país. Además, niegan abrir la mano. «Se habla de que cuando estamos cabreados dejamos salir a subsaharianos. Es mentira», dicen.
Sin embargo, en los campamentos de inmigrantes cercanos a Ceuta les contradicen. Aseguran que la policía marroquí hace todo lo posible por facilitar su salida y empujarles a viajar a Europa.
Los recursos de Marruecos, mientras tanto, se centran en parar a las mafias que trafican con los migrantes. Pero insisten en que necesitan más fondos.