La mujer de Leopoldo López, Lilian Tintori, denunciaba a primera hora de este martes que varias personas entraron en su casa de madrugada y se llevaron al dirigente opositor venezolano. “Se acaban de llevar a Leopoldo de la casa. No sabemos dónde está”, ha publicado en su cuenta de Twitter.
#URGENTE se acaban de llevar a Leopoldo de la casa. No sabemos donde está ni a dónde lo llevan. Maduro es responsable si algo le pasa.
— Lilian Tintori (@liliantintori) August 1, 2017
12:27 de la madrugada: Momento en el que la dictadura secuestra a Leopoldo en mi casa. No lo van a doblegar! pic.twitter.com/0EdlQvEGXS
— Lilian Tintori (@liliantintori) August 1, 2017
Asimismo, el diputado Richard Blanco, coordinador del partido Alianza Bravo Pueblo (ABP), indicó en la misma red social que el Sebin se llevó “al alcalde Ledezma” también esta madrugada.
El sebin se acaba de llevar al alcalde Ledezma . Que el mundo entero lo sepa pic.twitter.com/CoJVypjNfw
— Dip.Richard Blanco (@RichardBlancoOf) August 1, 2017
Según la información de la que dispone el entorno de Leopoldo López, éste habría sido llevado a la prisión de Ramo Verde, la cárcel donde estuvo preso tres años y medio y de la que salió el pasado 8 de julio por orden del Tribunal Supremo de Justicia “por motivos de salud”.
Algunos dirigentes de Voluntad Popular (VP), el partido de López, así como de ABP, la formación de Ledezma, responsabilizaron al presidente Nicolás Maduro por la integridad física de ambos y aseguraron desconocer el lugar al que fueron trasladados.
Varios representantes de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática(MUD) difundieron en Twitter un vídeo que muestra cómo Ledezma fue sacado en pijama de su residencia, donde estaba bajo arresto domiciliario desde 2015, por funcionarios del Sebin que se lo llevaron en una camioneta.
https://twitter.com/Miguel_AngelC/status/892266436558827520
Estas detenciones se producen 24 horas después de la celebración de la votación de la Asamblea Nacional Constituyente impulsadas por el presidente Nicolás Maduro y rechazadas por las fuerzas opositoras, que no presentaron candidatos. Con esos comicios el Gobierno venezolano pretende desmantelar el actual Parlamento, controlado por una mayoría crítica con el chavismo, y constituir una nueva Cámara.
Al término de la jornada electoral, en la que no participó más del 41% del censo según los datos oficiales, Maduro amenazó con levantar la inmunidad judicial del fuero parlamentario y con reestructurar la Fiscalía. Ya lo había advertido durante la campaña: esas elecciones iban a ser para el chavismo una oportunidad para cobrar “todas las cuentas”.