A pocos días de cumplirse el plazo establecido, Reino Unido y la UE han llegado por fin a un acuerdo sobre el Brexit. Theresa May se enfrenta así esta semana a la penúltima prueba de un ‘calvario’ que ha durado dos años. Tendrá que presentar a sus ministros, en un consejo extraordinario, el texto de cerca de 500 páginas que recoge la salida del país del ámbito europeo.
El acuerdo está lleno de aspectos técnicos y, sobre todo, de una solución para Irlanda del Norte. Sin duda, el obstáculo que hasta ahora impedía de manera más fuerte un pacto entre ambas partes.
Este pasado martes, Theresa May comenzaba a convocar a sus ministros para explicarles los detalles del acuerdo. La primera ministra británica quiere saber si contará con el apoyo suficiente en su propio Gobierno para aprobar el pacto con Bruselas. Si lo considera posible, este miércoles convocará un Consejo de Ministros formal para poner el sello definitivo al Brexit.
Acuerdo in extremis
El pacto alcanzado entre Reino Unido y la UE ha sido posible tras ponerse de acuerdo en cuanto a Irlanda del Norte. La UE pretendía que se mantuviera dentro de la Unión Aduanera. Por su parte, los británicos rechazaban una frontera dura entre las dos Irlandas. Porque, aseguraba el equipo de May, llevaría a la desestabilización y atentaba contra la integridad territorial del país.
Al final, Bruselas aceptaba la propuesta de May. Todo Reino Unido permanecerá dentro de la Unión Aduanera durante el periodo de transición de dos años. Un tiempo que empezará el próximo 29 de marzo, fecha de la entrada en vigor del Brexit.
Con todo ello, aún queda por resolver la gran duda de si Reino Unido podrá abandonar unilateralmente la Unión Aduanera cuando quiera. O si se establecerá un mecanismo de intermediación.
Además de las reuniones que May está manteniendo, en UE los representantes de los Veintisiete han sido convocados. El encuentro estaba previsto inicialmente para hablar de las medidas de contingencia ante un posible divorcio sin acuerdo con Londres. Pero a última hora se ha añadido a la agenda el análisis del estado de las negociaciones.