El candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, ha visto frustrada este martes por segunda vez su investidura, debido a la abstención de JxCat, y ha advertido de que, si consigue ser investido, no se dejará «tutelar» por el Consejo por la República que lidera Carles Puigdemont.
No ha habido sorpresas: como ya anunciaron, los 32 diputados de JxCat se han abstenido, como en la primera votación del pasado viernes, y han vuelto a frenar la investidura de Aragonès. Al no haber obtenido mayoría simple, se ha emplazado a las formaciones políticas a seguir negociando para alcanzar un acuerdo en las próximas semanas.
En la segunda votación en el Auditorio del Parlament, se ha repetido el resultado del viernes: frente a los 42 ‘síes’ de ERC y la CUP, Aragonès ha recibido 61 votos en contra de PSC, Vox, En Comú Podem, Ciudadanos y PPC, además de las 32 abstenciones de JxCat.
Ahora, la presidenta del Parlament, Laura Borràs, deberá abrir otra ronda de consultas con los líderes parlamentarios antes de formular una nueva propuesta de candidato a la investidura, a la que sigue aspirando Aragonès, que confía en mover a JxCat hacia el ‘sí’.
Desde la votación fallida del viernes se ha activado la cuenta atrás de dos meses para intentar investir a un nuevo president, por lo que ERC y JxCat deberán intensificar sus negociaciones en las próximas semanas para evitar que, si no hay investidura, el 26 de mayo sean convocadas automáticamente elecciones para julio.