Emmanuel Macron no gana para disgustos. A la caída en picado de su popularidad y sus continuas salidas de tono suma ahora un intento de dimisión en su Ejecutivo. Gérard Collomb, ministro de Interior, le presentó en la noche del lunes su renuncia, pero el presidente francés la rechazó para evitar abrir otra crisis de gobierno.
La decisión de Collomb está motivada por las críticas que ha recibido tras anunciar su intención de presentarse a la alcaldía de Lyon en las municipales de 2020. Y es que el ministro aseguró el pasado 18 de septiembre que dejará la cartera el próximo verano para dedicarse a tiempo completo a la preparación de la campaña.
Desde ese día, diferentes voces de la oposición han pedido que el titular de Interior abandone cuanto antes su actual cargo, con el argumento de que sus responsabilidades son demasiado importantes como para estar pensando en sus ambiciones en Lyon.
Macron le renueva su confianza
Todo ello le ha llevado a presentar su dimisión al presidente. Macron, sin embargo, “le ha renovado su confianza” y le ha pedido que siga “plenamente movilizado en su misión por la seguridad de los franceses”, tal y como ha desvelado un consejero del jefe de Estado.
El diario ‘Le Figaro’, que fue inicialmente el que reveló que el titular de Interior había presentado su dimisión, señaló que con este gesto Macron quiere “cortar por lo sano las tentativas de desestabilización” que Collomb considera estar sufriendo desde el 18 de septiembre. De haberla aceptado, hubiera sido la segunda dimisión de peso en poco más de un mes, tras el abandono del ministro de Ecología, el popular Nicolas Hulot.
Collomb fue uno de los principales valedores de Macron cuando en 2016 dejó el Gobierno del entonces presidente socialista François Hollande, para lanzarse a la carrera por la jefatura del Estado. Pero también ha sido uno de los miembros del Ejecutivo que se ha atrevido a criticarle. Este verano reconoció que se habían cometido errores por falta de humildad.