Tercera mesa de diálogo. El Gobierno de España y la Generalitat de Cataluña han sellado este miércoles dos acuerdos para «desjudicializar la política» y para «impulsar y proteger la lengua catalana», dando autonomía a los centros educativos en Cataluña para que decidan sobre el reforzamiento de esta lengua y sobre su uso en el Parlamento europeo.
Así lo ha avanzado el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, en una rueda de prensa tras la reunión que ha mantenido en el Palacio de la Moncloa la mesa de diálogo sobre Cataluña con delegaciones de ambos gobiernos.
Bolaños ha detallado que gracias a estos dos acuerdos se abandonan los «monólogos» y se abraza el diálogo como forma de hacer política, renunciando a acciones «que saquen la política fuera del juego democrático».
El ministro de la presidencia ha concretado que en el impulso a la jurídico vigente y que la eventual mejora del marco normativo se ha de producir mediante mecanismos ya establecidos, además de que los acuerdos deben ser con mayorías «grandes».
«Se renuncia a acciones que dejen la política fuera del juego democrático», ha añadido tras incidir en que «nunca más el enfrentamiento estéril ya que ahora el compromiso es con acuerdos mayoritarios para superar los conflictos».
Bolaños ha incidido en que las instituciones públicas han de preservar el interés general y en referencia al acuerdo para impulsar la diversidad lingüística ha avisado que el objetivo es preservar la «riqueza» de las lenguas en España.
Lengua catalana
Entre las premisas que centran el pacto con la Generalitat sobre la lengua catalana, el ministro de la presidencia ha reconocido y valorado la ley sobre la protección de la lengua catalana aprobada por el Parlament con un 80 % de consenso y ha señalado que el Gobierno aprueba que cada centro educativo tenga autonomía para reforzar la lengua que considere más oportuna.
«Fortaleceremos la lengua catalana centrada en derechos y libertades del alumnado y el pleno dominio oral y escrito de todos los estudiantes», ha recalcado.
Bolaños ha resaltado la ley catalana como «un buen ejemplo de acuerdos trasversales muy amplios. Una ley que está perfectamente adecuada a la Constitución y al Estatuto de Cataluña».
Asimismo el Gobierno se ha comprometido a proyectar la diversidad lingüística en el ámbito internacional y solicitar el catalán como lengua de uso en el parlamento europeo, al igual que en el Senado español.
El reforma del delito de sedición
Sobre la posibilidad de reformar el delito de sedición que solicita la Generalitat catalana Bolaños ha insistido en que no existe en estos momentos la mayoría parlamentaria «transversal y amplia» que el Gobierno cree necesaria para ello y ha segurado que este asunto no se ha tratado en la reunión de hoy.
«A lo que nos hemos comprometido es a seguir hablando con discreción», ha asegurado Bolaños, que ha explicado que tampoco se ha abordado en este encuentro la creación de mayorías parlamentarias para aprobar otras leyes, como los presupuestos generales del Estado.
El ministro ha destacado el ambiente sincero y constructivo de esta tercera reunión que en su opinión supone un paso más respecto a las dos primeras ya que «empezamos a recoger frutos concretos» y ha aseverado que en cuatro años de diálogo con el gobierno socialista «se ha hecho más que en tres legislaturas de enfrentamiento e inmovilismo».
Ha hecho un llamamiento también al diálogo entre partidos catalanes, en referencia a ERC y jxCAT, ya que es imprescindible porque «gana Cataluña y la mayoría social», toda vez que Junts no ha querido participar en esta reunión.
Bolaños ha avanzado que aún queda mucho diálogo por delante y que «hoy no es un punto y final».